Valoración del periodo de acostumbramiento en bovinos

Establecer estrategias que minimicen el período entre cambios de dietas resulta en una mayor eficiencia productiva. En este periodo el rumen se adapta a una dieta totalmente nuevo. Si bien en la mayoría de los casos se lo relaciona con la composición de los microorganismos del rumen, también el acostumbramiento puede aprovecharse para incorporar una nueva práctica, infraestructura o manejo diferencial. 

En los distintos sistemas productivos el periodo de acostumbramiento es una etapa crítica que involucra más que una modificación en la alimentación. 

El establecimiento de las estrategias para realizar este importante proceso, permite disminuir el lapso para el inicio del consumo de la dieta de transición o final dependiendo de la etapa productiva donde se realice, resultando en una buena conversión alimenticia y en definitiva una mejor eficiencia productiva. 

Para el caso de los engordes a corral, las condiciones en donde se desarrollarán los próximos meses probablemente genere condiciones de estrés, máxime cuando se busca que el periodo de engorde sea el mínimo posible. Estos episodios de estrés generan un incremento en los días que demanda el acostumbramiento a dietas de alta energía. 

Entre los factores que generan estrés y repercuten en el período que demanda el acostumbramiento pueden mencionarse la unificación de lotes provenientes de distintos campos, la estrategia de destete con la que se separaron de las madres, la duración del viaje desde el campo de origen hasta el nuevo establecimiento y el ayuno previo al arribo con el que cuenten. 

Importancia de los registros en el éxito de las prácticas

Las medidas de precaución deben extremarse además si los animales nunca han recibido dietas compuestas con una alta proporción de granos. En la búsqueda de mejoras en los resultados se destacan los registros de las condiciones previas a la recepción. De esta manera se podrá planificar de mejor manera el ingreso de los diferentes envíos. Como información valiosa a recabar pueden mencionarse: oferta forrajera anterior, origen de los lotes, si vienen directo de un campo de un remate feria, tratamientos sanitarios recibidos, características del destete, etc. 

Duración del período de acostumbramiento

Para aquellos animales que han sido destetados y su dieta era leche materna o para aquellos que han empezado a consumir cantidades de forraje el período de acostumbramiento tiene la función de adaptar al sistema digestivo al consumo a una oferta enteramente basada en alimentos sólidos. 

A su vez, en animales de mayores desarrollos también una de las funciones del acostumbramiento es la de adaptar los microorganismos del rumen de orden mayormente celulolíticos a microorganismo que degraden mejor las elevadas concentraciones de almidón típicas de este tipo de dietas. 

En términos generales, la duración del periodo de acostumbramiento para los animales al pasar a una dieta de alto contenido de almidón se encuentra entre los 14 y 21 días. Este plazo está condicionado por la capacidad con la que se adapten los animales y el manejo que se establezca como rutina. Es importante la regularidad en el suministro para evitar los picos de fermentación que pueden resultar perjudiciales considerando las jerarquías propias de las tropas y las nuevas relaciones que se establezcan al mezclarse distintos orígenes. 

Cambios en organismo durante el proceso de adaptación

Durante esta etapa se produce una variada serie de cambios que desencadenan en la adaptación del rumen a una microflora diferente y las modificaciones que se registran en las paredes ruminales y el hígado, el cual cambia los productos que procesa. A continuación, se mencionan los principales cambios:

  • Adecuación de las papilas de las paredes del rumen para las condiciones de mayor acidez producto del cambio en la fermentación, 
  • estimulación de los procesos fisiológicos intervinientes de los ácidos grasos originados en la degradación del almidón,
  • Incremento en la capacidad del hígado para procesar metabolitos de carácter ácido y convertirlos en triglicéridos o ácidos grasos de cadena larga, los cuales pueden ser aprovechados por el metabolismo propio.

Todas estas variaciones permiten aprovechar los metabolitos originados en la fermentación. 

Estrategias de alimentación durante el acostumbramiento

Resulta clave para acortar el tiempo de engorde total, un periodo de acostumbramiento que ocupe la menor duración posible respetando la demanda de los procesos fisiológicos. Con esta combinación se espera obtener mejoras en la rentabilidad de la explotación.

La asignación de espacio y la oferta de ración en comederos de autoconsumo reduce el estrés ya que las situaciones de competencia prácticamente se anulan. Similar resultado se puede lograr asignando frente suficiente en los comederos lineales. 

En la ración de adaptación es recomendable incluir sal común a los fines de limitar el consumo y evitar disturbios a nivel digestivo por excesos que puedan darse.

Entre los primeros 3 o días es recomendable comenzar suministrando heno de calidad (buen nivel de proteína y digestibilidad) en un 75% del total de la dieta. 

Es importante para animales que han sido destetados cerca de la carga enseñar la ubicación de los comederos y bebidas. Lo que implica la rutina de recorrer los corrales varias veces y estimular el contacto con estas instalaciones. 

Para animales de menos de 250 kg/cab, la ración de inicio debe tener un mínimo de materia seca (MS)entre 80% y 85% para un consumo adecuado. Animales que superen ese peso, pueden consumir dietas con un 75% de materia seca (MS) sin resentir su consumo.

La incorporación de los distintos componentes de la dieta debe ser en forma gradual durante el periodo de acostumbramiento considerando que la flora para la degradación del almidón también está en crecimiento.

La distribución del concentrado es deseable se haga sobre el heno de manera homogénea. Esta distribución permite disminuir el riesgo de lesiones a las parees del rumen con las consecuencias desfavorables que tiene para el desempeño futuro del animal. 

Conclusión

El bovino demuestra capacidad para lograr eficiencias productivas con un amplio espectro de alimentos. Ya sea forrajes frescos, conservados, granos, subproductos de otras industrias, etc. Para que el uso de estos recursos resulte en un incremento de la producción es requisito indispensable realizar y respetar el período de acostumbramiento en el que la flora ruminal se adapta a las nuevas condiciones que se producen dentro del mismo. Un incremento gradual en la ración de los nuevos alimentos junto con un manejo adecuado de las instalaciones asegura el éxito en esta etapa.