Es importante a la hora de poder determinar la severidad de una enfermedad en un rodeo, cuantificar de manera correcta la cantidad de animales que tienen dicha enfermedad, para poder realizar un análisis más riguroso y efectivo.
En todo análisis, independientemente de lo que se esté estudiando, la cuantificación no debe estar atada al “n” de la población. Ese mismo número total debe ser el que se usa para poder hacer el análisis en comparación con la población, en estadística los números absolutos no tienen incidencia a la hora de hacer este tipo de análisis.
Existen tres conceptos estadísticos que ayudan a hacer un análisis de la enfermedad, independientemente de cuál sea. Estos conceptos son la prevalencia, la incidencia acumulada y densidad.
Se debe tener en cuenta que a la hora de hacer la determinación de la enfermedad, hay dos situaciones marcadas que hacen más fácil al análisis, el animal puede estar enfermo, o no estarlo.
Bajo este concepto y entendiendo las únicas dos posibilidades, la prevalencia se entiende por la cantidad de animales que tienen la enfermedad en un tiempo determinado, mientras que la incidencia acumulada y de densidad lo que tiene en cuenta es cuantos animales pasan de estar sanos a estar enfermos en un periodo de tiempo, es decir, miden la velocidad de propagación de la enfermedad en el rodeo.
El concepto de prevalencia tiene en cuenta todos los animales que poseen la enfermedad independientemente si son casos que ocurrieron hace poco o hace mucho. Es decir, todos los casos presentes en el rodeo. Es un concepto que representa una parte de la población, lo que hace que sus valores nunca sean superiores a uno, ya que nunca se puede representar más de lo que hay. Los valores oscilan entre cero y uno y cuando más cerca de cero esta el resultado, menos prevalencia de la enfermedad hay en el rodeo y mientras más cerca del uno lo este, mas animales están enfermos, y mayor es el asunto de gravedad en la tropa.
Se calculo dividiendo la cantidad de animales que están enfermos por la cantidad total de animales que conforman al rodeo. Por ejemplo, si en un rodeo de cien animales hay veinte con una enfermedad “x”, el índice de prevalencia es 0,2 (20/100).
Este es un índice muy importante porque nos dice rápidamente con el simple hecho de ver el número, la relevancia que está teniendo dentro de nuestro rodeo y poder determinar la necesidad de actuar de manera rápida o no, de darle prioridad o no.
Los otros índices, de incidencia acumulada y de densidad, son importantes para ver también la velocidad de avance que tiene la enfermedad en nuestra población y así también, poder determinar la prioridad de atacar según el avance que está teniendo.
Por supuesto que es de entender que el concepto de prevalencia va de la mano de la incidencia y están íntimamente ligados.
Es importante antes de conocer las enfermedades a nivel individual y las características de cada una de ellas, saber cómo se debe hacer un correcto análisis de este tipo de cuestiones y la importancia de los parámetros a analizar, independientemente de la enfermedad de la cual se esté tratando.
Entendiendo esto, se está en condiciones de saber las particularidades de cada enfermedad y poder determinar la relevancia de la misma en nuestro rodeo.
Para poder determinar un ejemplo, la enfermedad, conocida como CGB, que proviene de las siglas de Campylobacteriosis Genital Bovina, es una enfermedad que está íntimamente ligada a la no fertilidad de los animales y a la posibilidad de abortar que se presenta en el bovino. Se transmite de manera venérea y afecta a todo tipo de producción independientemente si es de carne o de leche.
Es muy importante poder determinar y conocer correctamente su prevalencia en el rodeo ya que la incidencia acumulada es muy alta. Al tratarse de una enfermedad que se transmite de manera sexual, es muy fácil que se disemine rápidamente por todo el rodeo haciendo que la cantidad de casos sea muy alta, impactando rápidamente en el porcentaje de preñez de las vacas.
Si bien hace muchos años fue una enfermedad de mucha importancia que le generaba unos cuantos dolores de cabeza a los ganaderos, hoy en día es de menor importancia ya que existen diferentes manejos que hacen que la relevancia de la misma disminuya.
La nueva tecnología de poder hacer inseminación artificial hace que se evite el contacto sexual entre los animales y bajar la posibilidad de contagio. Hacerle el raspaje a los toros también es una medida muy importante para poder evitar la diseminación de la bacteria en todo el rodeo.
Esto se debe a que el toro reproductor, el que monta a las vacas para preñarlas, es el que lleva la enfermedad de una manera asintomática, es decir, uno no puede ver síntomas de la misma, independientemente si está enfermo o no, ya que a él, la capacidad reproductiva no se ve afectada.
La vaca si es el animal que si lo porta lo va a manifestar, mostrando un ciclo estral prolongado o también con índices de preñez bajos que son causados por el aborto espontaneo del ternero en etapas tempranas de gestación.
Para hacer un diagnóstico el análisis se hace tanto por sobre los toros como por sobre las hembras y los fetos. En el caso de los toros lo que se observa es por medio, o de un raspaje con ciertos días de diferencia para poder evitar algún resultado no verídico o por medio del análisis del semen del mismo.
En el caso de las hembras el análisis se hace tomando una muestra del mucus que contiene en la vagina y en el feto, la observación se hace principalmente sobre los pulmones del mismo.
De esta manera y esos análisis lo que le permite al ganadero es saber si los índices bajos de preñez son a causa de la enfermedad y no por otros motivos, de manejo por ejemplo.
Autor:
Director Gr-Global | Productor Ganadero
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